viernes, 25 de mayo de 2018

Cuando estaba iniciando el (quinto de Desarrollo Personal), Emocional Mente (Ediciones Obelisco, 2014),

Cuando estaba iniciando el (quinto de Desarrollo Personal), Emocional Mente (Ediciones Obelisco, 2014),manuscrito de mi sexto libro me topé no por casualidad, con la excelente obra de Charles C. Manz, Disciplina Emocional (Paidós, 2005), y en concreto con las siguientes cuatro claves para manejar el estado de ánimo: "1) Asumir la responsabilidad del estado de ánimo personal. 2) Hacer cosas ahora (en el presente) como preparación para el futuro (que contribuirán a recargar la reserva de energía emocional).  3) Reaccionar ante situaciones que planteen un reto emocional de una forma nueva, más equilibrada y saludable. 4)  Escoger opciones específicas (aplicar estrategias) para enfrentarse de forma efectiva a los retos en el momento en que se plantean”.   De modo que escribí Emocional Mente con la aspiración de mostrar cómo gestionar las emociones teniendo en cuenta esta sabia terna de recomendaciones.   En la primera parte del libro aconsejaba tomar consciencia de que somos nosotros mismos, y no tanto las circunstancias, quienes nos amargamos la vida. Revelaba cómo tenemos el don de hacernos desdichados, y cómo debemos aprender a evitar considerarnos víctimas y a asumir la responsabilidad de sentirnos de buen (o mal) humor. Hacía un especial hincapié sobre todas las cosas que fallaron en la educación que recibimos para que de mayores poseamos esquemas cognitivos disfuncionales, que generan en nosotros, sin querer, pensamientos negativos.  En la segunda parte, contaba cómo podemos fortalecer nuestra "Maravillosa Mente" para construirnos hoy un buen carácter, que nos permita en el futuro generar inconscientemente “buenas ideas”, experimentar “buenos sentimientos” y gozar de “buenas emociones”. Explicaba también cómo reeducarnos para eliminar, en la medida de lo posible, los citados esquemas cognitivos disfuncionales adquiridos en nuestra tierna infancia, y sustituirlos por otros más adecuados.  En la tercera parte, que se me antojaba la más esencial y novedosa del libro, obsequiaba al lector con un "kit de primeros auxilios emocionales" para que en momentos puntuales de aflicción, ira, estrés, miedo, etc., fuera capaz de levantar el ánimo, controlar la situación, evitar la angustia o incluso vacunarse contra algunos tipos de depresión.   Y en la cuarta y última parte, exponía el Cuadro de Mando Emocional ®, un poderoso instrumento de anclaje de sentimientos adecuados para que seas capaz de reproducirlas en esos momentos donde una persona se la juega: negociaciones difíciles, presentaciones en público, reuniones familiares o profesionales conflictivas, exámenes finales... Bambú japonés “Las emociones son el sistema de orientación interno (…) Tenemos en nuestro interior el poder de crear una vida de alegría, abundancia y salud, y tenemos la misma capacidad para crear una vida llena de tensión, fatiga y enfermedad. Salvo contadísimas excepciones, la decisión depende de nosotros”.   Christiane Northrup  Como sabrá el lector con el bambú japonés se produce un fenómeno muy curioso. Primero debes sembrar la semilla. Le echas el abono, y la empiezas a regar a menudo. ¡Durante los primeros siete años no ocurre absolutamente nada! Hasta que de pronto, en tan sólo seis semanas surge la planta de bambú y crece casi treinta metros. Durante el enorme lapso de tiempo de aparente inactividad, el bambú se va enraizando en el subsuelo del jardín mediante una milenaria e intrincada estrategia, que, llegado el momento idóneo, le permite en poco más de mes y medio crecer de aquella forma tan espectacular. El éxito verdadero, el que se basa en reestructurar la psique de un individuo para que adquiera las características que propician el logro, se parece al bambú japonés: se requiere un tiempo prolongado de desarrollo de habilidades internas bien enraizadas neuronalmente, antes de poder alcanzarlo. En su excelente libro Los hijos: cómo estimular su potencial de éxito, que tuve el inmenso honor de prologar, el psicólogo, gran amigo y ex Director de Euncet Business School afirma que "La escolarización es una etapa de gran productividad mental y emocional (...) El trabajo de gestión del conocimiento que llevan a cabo los profesores en las escuelas, la creación del clima de trabajo idóneos para que el aprendizaje se corresponda con la capacidad de aprender de los alumnos, es esencial para que éstos se enfrenten a su futuro con garantías de éxito." Y concluye: "Dirigir un grupo de alumnos durante varias horas diarias es tarea difícil, sobre todo cuando hay tanta heterogeneidad de culturas, de procedencias étnicas, de valores y de creencias. A ello hay que añadir que los niños llegan con un discreto dominio del lenguaje y con niveles de conocimiento muy dispares. "Hay que decir aquí que el profesorado debe, a su vez, seguir una formación permanente en metodologías de aprendizaje, en tecnología aplicada a la transmisión del conocimiento y a la conducción de equipos de niños y adolescentes, especialmente en situaciones problemáticas. "El mundo educativo está en plena evolución en todas partes. En general los sistemas de escolarización y capacitación de niños, adolescentes y jóvenes han envejecido mal porque no han seguido el ritmo de renovación que la sociedad global y tecnológica ha desarrollado. Mantenemos todavía un modelo de enseñanza de mediados del siglo XX, en cuanto a diseño y estructura de funcionamiento, cuando debe afrontar los retos y problemas del siglo XXI." Se me antoja que la etapa de la denominada Educación Infantil, y los primeros cursos de la Enseñanza primaria pueden representar para el desarrollo futuro del niño lo que los siete años aparentemente estériles de siembra, riego y cuidados, significan para el bambú japonés. Por ello voy a dedicar dos post a "Cómo educar la Inteligencia Emocional en la escuela: una nueva propuesta" Marta Melgar Trullàs: una maestra excepcional, especializada en lectoescirtura “Aquellos que educan bien a los niños merecen recibir más honores que sus propios padres, porque aquellos sólo les dieron vida, éstos el arte de vivir bien”.    Aristóteles  Soy un tipo de largo plazo. Prefiero ganar la liga que la Champions. Cuando conocí a mi esposa, ella era un bellezón de 20 años. Le advertí que no me interesaban las aventuras de una sola noche, porque me encariñaba con la gente, y ella me espetó que para nada era "chica de un fin de semana". ¡Llevamos treinta años felizmente juntos! Cuando me inscribí en LinkedIn leí mucha bibliografía sobre el tema y consulté a excelentes profesionales como Miquel Nadal y David Carulla. Aprendí que si se querían obtener resultados en esta red (y no soy persona de dar puntadas sin hilo) tenían que invertirse un buen número de horas (le dedico un promedio de 25 a la semana) y esperar unos nueve meses. Pues bien, la metáfora del bambú japonés se está verificando con creces en este caso. Cumplo 10 meses en LinkedIn, y día sí y día también se van produciendo "milagros". En concreto dos, que intuyo (y espero) van a dar el empujón definitivo a una de las líneas de investigación que surgen de mi tesis doctoral (La reeducación del individuo mediante el método grafotransformador): la educación de la Inteligencia Emocional de l@s niñ@s en la escuela gracias a la Programación Neuro-Caligráfica que quien suscribe estas línea ha ideado. Me estoy refiriendo (por estricto orden de "aparición" en mi red de contactos en LinkedIn) a dos personas y profesionales excepcionales: Yolanda Jiménez Romero (Máster en Neuropsicología de las Altas Capacidades Intelectuales; Directora Instituto Extremeño- Castilla la Mancha Altas Capacidades en Instituto Internacional AACC; y autora del libro La Programación Neurolingüística y los hemisferios cerebrales como herramientas de aprendizaje"- Siníndice editorial, 2016) y Marta Melgar Trullàs (Grado de Educación Infantil; Maestra; Técnico Especialista en Jardín de Infancia; y autora del trabajo científico El Enfoque Orton-Gillingham de lectoescritura. Propuesta de intervención en el aula de P-4 de Educación Infantil a través de un método multisensorial -UNIR, 2015-). Hoy hablaré de la segunda, y el próximo sábado en mi post Cómo educar la Inteligencia Emocional en la escuela (II), haré lo propio de la primera. El orden viene justificado porque con Marta Melgar y Yolanda Jiménez pretendemos desarrollar un método en dos etapas- con Marta, P4 y P5, y con Yolanda, los primeros cursos de la Enseñanza Primaria- para aprovechar los años que se invierten en la escuela a la hora de enseñar a escribir a mano, para cultivar el terreno neurológico de l@s alumn@s en aras de que florezca un inmenso bambú japonés en forma de una bien educada Inteligencia Emocional. @Marta Melgar es una maestra excepcional. Cuenta con 21 años de experiencia en la enseñanza de la lectoescritura con una serie de estrategias basadas en "el enfoque Orton-Gillingham" que ha adaptado y mejorado para implementarlo en territorio español. El pasado 22 de marzo contactamos a través de LinkedIn porque ambos tenemos hijas de 19 años diagnosticadas con TDAH, y enseguida me interesé por la letra de la suya. Se notaba que es Marta es quien le había enseñado a escribir. Su caligrafía no tiene nada que ver con la propia de l@s niñ@s con déficit de atención y/o hiperactivos, a la que me refería en un anterior post: www.linkedin.com/pulse/tdah-y-caligrafía-joaquim-valls-morató/. Me interesé por su metodología, y leí su Trabajo de Final de Grado antes citado: ¡simplemente extraordinario! La técnica de esta maestra es sencilla y llanamente magistral, y entronca con las herramientas propias de la PNL, en las que la citada Yolanda Jiménez es especialista, y con las de mi PNC. Así en uno de los primeros párrafos del texto científico citado, Melgar afirma que el método que ella emplea es: "multisensorial, basado en la fonética del lenguaje, enfatizando el aprendizaje visual, auditivo, táctil y Kinestésico, con el cual los alumnos mejoran la memoria y el aprendizaje". Para añadir algo que me parece sumamente importante: "Es un método de enseñanza aplicable a todos los alumnos, tengan o no, dificultades, para aprender a leer y a escribir". Y no se trata de una mera promesa. Me consta que Marta Melgar (por ejemplo, lo he visto con mis propios ojos a través de la caligrafía de su hija), enseña con una rapidez y una eficiencia asombrosas a leer y a escribir a niñ@s con dislexia, TDAH, etc. Método KIMMEL para a través de la enseñanza de la lectoescritura educar la Inteligencia Emocional “Un buen carácter vale tanto como un buen patrimonio”.   William Hazlitt  Y es que el método que utiliza Marta Melgar para enseñar a leer y a escribir tiene la virtud de estimular todos los canales sensoriales de forma simultánea, optimizando y enriqueciendo el proceso de aprendizaje de to@s l@s alumn@s, que es justo a lo que aspira la Programación Neuro-Caligráfica, en su caso, con adolescentes y adultos, en aras de su "reeducación emocional". ´Se trata de dotar a nuestr@s hij@s de un carácter ideal que sea uno de sus grandes activos a lo largo y ancho de su vida. Y para conseguirlo debemos tener muy en cuenta la célebre frase de Aristóteles: "Somos lo que repetidamente hacemos. De esta forma, la excelencia no es un hecho aislado, sino un hábito”. Y, en efecto la repetición es una de las claves de la PNC, y a la vez uno de los escollos más importantes en mi objetivo de aplicarla en la escuela. ¿Cómo hacerle repetir a un niño mil veces una cosa sin que pierda el interés o incluso se agobie y desista? En este sentido la estrategia de Marta Melgar es de cum laude, ya que consigue que, parafraseando la bella frase de Horacio, "el placer" que acompaña la ingente tarea de aprender a leer y a escribir "pone en olvido la fatiga". En este sentido ha adaptado y/o ideado una batería de actividades en forma de juegos muy estimulantes para l@s niñ@s de P4 y P5 que hacen que sus alun@s aprendan por repetición sin que se percaten de ello. En su TFG cita exactamente 33, que lo confieso he leído con deleitación, pero me asegura que ella, en sus clases, usa muchísimas más. Pondré tres ejemplos: 2a Actividad: La profesora seleccionará una palabra que empiece por cada una de las letras del abecedario (no tiene relevancia alguna la palabra seleccionada, a pesar de que se intentarán buscar palabras familiares para ellos). Posteriormente buscará una imagen insertándola al lado de cada letra para que los alumnos puedan asociarla con facilidad. Tanto las imágenes como las letras se realizaran en un tamaño adecuado para ser colgadas en la clase y que los alumnos puedan verlas correctamente. Fuente: Elaboración propia. Una vez realizado se procederá a colgarlo en un lugar visible y a través de una canción la profesora enseñará a los alumnos cómo suena cada letra. Esta canción juntamente con la anterior serán cantadas cada día al inicio de la clase. De esta manera los alumnos conocerán los nombres de todas las letras así como su sonido. 14ª Actividad: Interiorizadas todas las letras así como sus sonidos se procederá a trabajar las sílabas. Se comenzará con las letras que presenten menos dificultad (M, P, T, R, S, L), procurando buscar palabras que sean utilizadas en su vocabulario diario. Para poder llevarlo a cabo correctamente, la profesora creará unas cartulinas con las diferentes sílabas trabajadas. A medida que los alumnos las vayan reconociendo éstas se irán colgando en un sitio visible para poder ser repasadas a diario. BA BE BI BO BU  CA CE CI CO CU   DA DE DI DO DU FA FE FI FO FU GA GO GU GE GI HA HE HI HO HU JA JE JI JO JU KA KE KI KO KU LA LE LI LO LU LLA LLE LLI LLO LLU MA ME MI MO MU NA NE NI NO NU PA PE PI PO PU RA RE RI RO RU SA SE SI SO SU TA TE TI TO TU VA VE VI VO VU WA WE WI WO WU XA XE XI XO XU YA YE YI YO YU ZA ZE ZI ZO ZU Fuente: Elaboración propia. Se utilizará la misma pauta para introducir las consonantes, realizando diferentes actividades para conseguir que los alumnos las interioricen correctamente. 24ª Actividad: La profesora escribirá todas las letras del abecedario en el suelo del patio y proporcionará a los alumnos un vaso de plástico con un poco de agua dentro y un pincel. Los alumnos deberán repasar las letras con el pincel. Esta actividad se realizará en un día soleado, ya que así el agua se secará y podrán volver a repasar las letras de nuevo. Esta actividad también puede ser realizada en la pizarra de la clase. Se tendrá especial cuidado en que los alumnos las repasen en la direccionalidad correcta en ambas actividades. La recomendación "Se tendrá especial cuidado en que los alumnos las repasen en la direccionalidad correcta en ambas actividades." se repite en varias de las estrategias propuestas por Marta Melgar. Le pregunté por ello en la entrevista que mantuvimos el pasado martes 10 de abril en Sant Cugat (población cercana a Barcelona, donde Marta reside con su marido Ígor, y su hija pequeña, Júlia), y en ese justo instante nació en mi cabeza el Método KIMMEL con el que Marta y quien suscribe estas líneas aspiramos a revolucionar la educación de la Inteligencia Emocional en las aulas aprovechando el recurso, ya utilizado, de enseñar a a leer y a escribir. "La direccionalidad es fundamental" -dijo literalmente-, y con el dedo fue dibujando la manera correcta de escribir cada letra, que coincide exactamente con la manera de hacerlo que propone la Programación Neuro-Caligráfica. De manera que únicamente debemos adaptar la forma tradicional de enseñar a escribir (de la que hablé en un post anterior(www.linkedin.com/pulse/somos-conscientes-de-la-caligrafía-que-se-enseña-en-las-valls-morató/) a las científicicas técnicas de la PNC, y a la excepcional metodología empírica de la excepcional maestra Marta Melgar. Written by ✓ Siguiendo Dr. Quim Valls Presidente del Instituto de

viernes, 11 de mayo de 2018

CUÁLES SON LAS CLAVES DE LA EDUCACIÓN SENTIMENTAL

¿CUÁLES SON LAS CLAVES DE LA EDUCACIÓN SENTIMENTAL? https://www.linkedin.com/pulse/cu%C3%A1les-son-las-claves-de-la-educaci%C3%B3n-sentimental-dr-quim-valls

sábado, 5 de mayo de 2018

Gaga de Elías Piña